Joel Staaf Hästö es un desarrollador indie de videojuegos sueco que en 2016 presentó este Kathy Rain. Junto a Petter Ljungqvist, responsable de The Samaritan Paradox, diseñó y desarrolló Whispers of a Machine, del que hablé un poco por aquí. Kathy Rain fue su primer juego, una aventura gráfica en la mejor tradición noventera de este género de videojuegos. Forma parte de una nueva generación de desarrolladores que creció con las aventuras gráficas de Sierra y Lucas Arts de los ochenta y los noventa. El alumno destacado sigue siendo Dave Gilbert con su compañía Watget Eyes, que tan buenos juegos nos ha entregado, generalmente ajenos, más que propios. Y que ha colaborado de alguna manera con esta nueva generación de desarrolladores. Desde Francisco González hasta Remigiusz Michalski, el mundillo de las aventuras gráficas es muy pequeño. 

Kathy Rain, como Joel Staff Hästö la ha definido, es una mezcla entre Veronica Mars, Twin Peaks y Gabriel Knight. Con algo de Buffy, cazavampiros, añadiría. Ambientada a mediados de los noventa, Kathy es una estudiante de periodismo que vive en una residencia universitaria compartiendo habitación con Eileen. Es precisamente su compañera Eileen la que descubre que el abuelo de Kathy ha muerto. Kathy, que ha tenido que firmar el ingreso de su madre en un  hospital psiquiátrico y que fue abandonada por su padre, no tiene contacto con sus abuelos desde que era una niña. Espoleada por la noticia que le pasa su compañera Eileen, decide dirigirse a Conwell Springs para el funeral de su abuelo Joseph Rain. Allí descubrirá unas misteriosas luces que se aparecen en el bosque, relacionadas con varios incidentes y muertes en Conwell Springs. ¿Qué misterios se ocultan en los bosques de Conwell Springs?

Kathy Rain es una aventura gráfica con unas mecánicas de juego calcadas a las de los juegos de los noventa, pero mucho más amables. Aquí no es posible quedarse atascado, ni morir y perder la partida, como era tan habitual en los juegos de Sierra. Con un pixel art precioso, el juego está diseñado para no frustrar demasiado al jugador, o al menos para no frustrarlo como lo frustraba hace unas décadas. Hay un buen sistema de pistas y el juego no te deja avanzar sin haber completado un capítulo. Dividido en cinco días, deberás proseguir con la investigación de Kathy hasta desentrañar el misterio en el quinto día. Los puzles están muy bien integrados en la trama. A nivel argumental, además de Veronica Mars, Twin Peaks, Gabriel Knight y Buffy, cazavampiros, también hay algo de Expediente X. No desentonaría nada ver a Mulder y Scully por este juego. Si los echas de menos, siempre puedes probar Thimbleweed Park, el juego de Ron Gilbert y Gary Winnick. 

Kathy Rain tiene su parte de ejercicio de nostalgia, que actualiza un género tan popular como fue el de las aventuras gráficas a la actualidad. Su evolución han sido las películas interactivas de Telltale y los juegos con una narrativa tan cinematográfica como Red Dead Redemption. Kathy Rain es un juego que disfrutarás si te gustaban las aventuras gráficas de los noventa. Todo adaptado a los tiempos actuales: una buena historia, un buen diseño y unos puzles lo suficientemente complejos como para tenerte enganchado. Hace no mucho salió al mercado un director's cut que añadía más puzles al juego. Quizás en unos años lo juego. De momento le voy a dar otro tiento al Whispers of a Machine, que me comí un bug como una catedral a mitad de partida y no lo pude terminar.