'La noche del demonio' (1957): el monstruo nunca duerme
La noche del demonio es una película de terror y misterio dirigida por Jacques Tourneur y estrenada en 1957. El mítico director franco-estadounidense de películas como Yo anduve con un zombi y La mujer pantera, aquí factura una película de serie B con moñeco/monstruo con regusto a cine clásico y noir. Protagonizada por Dana Andrews Peggy Cummnins y Niall MacGinnis, es una adapatación de un relato de M. R. James, El maleficio de las runas. La adaptación corrió a cargo de Charles Bennett y Hal E. Chester, a la postre productor de la película.
La noche del demonio narra la historia de John Holden, un psicólogo estadounidense que va a Londres para impartir unos cursos. Descreído de las creencias sobrenaturales, que atribuye a trucos o desequilibrios de la mente, debe encontrarse en Londres con otro profesor, Henry Harrington. Harrington se dedica a desenmascarar charlatanes y sectas. Su blanco actual es el Dr. Karswell, líder de una secta satánica. Descubrirá demasiado tarde que el Dr. Krswell es un brujo de verdad, y acabará siendo asesinado por una especie de demonio. Joanna, la sobrina de Harrington, junto a John Holden, investigarán esta muerte. Para Joanna, no hay duda de que algo sobrenatural se oculta tras la muerte de su tío. Sin embargo, para John, todo tiene una explicación racional. Siguiendo la investigación de Harrington, se topará con Karswell, que le advierte de que deje suinvestigación y vuelva a su país. Holden, que no se amedrenta, acaba marcado por Karswell, que predice su muerte para tres días después.
La película gira en torno a la investigación de John Holden sobre la secta liderada por el Dr. Karswell. Holden es el personaje escéptico, que ha dedicado toda la vida a la razón, con el que se identifica el espectador. Para él lo sobrenatural es cosa de mentes débiles y enfermas. Deberá de cuestionar sus certezas para desentrañar el misterio tras la muerte del profesor Harrington y así salvar la vida. En un primer momento cree estar autosugestionado y siempre, como Dana Scully en Expediente X, encuentra una justificación racional para lo que le sucede. Pero según avanza la trama, tiene que renunciar a su sistema de creencias para salvar la vida.
La noche del demonio es una película con moñeco. Aquí el productor, Hal E. Chester, contrario a los deseos del director, obligó a este a incluir las dos escenas donde aparece una especie de demonio, una al principio y otra al final de la película. Supongo que Chester tomó esta decisión influido por otras producciones de serie B de la década. Aunque es gracioso visto con los ojos de hoy, rompe el ritmo narrativo y la atmósfera de la película, que tiene un tono más contenido. También nos enseña que lo de un personaje huyendo a través del bosque mientras le persigue una nube de humo no lo invetó J. J. Abrams en Perdidos.
14 de abril de 2022, 11:20
Para desgracia de la película, el moñeco se ha convertido en el fotograma más memorable, e incluso hace que nos olvidemos de si valor cinematográfico, que es una buena película de terror que podría funcionar sin ningún efecto.
Cuando leí el relato en que se basa, además de las diferencias con el guión, me pareció curioso que el antagonista en ningún momento fuera alguien negativo..vale, que se denomina mago...¡pero eso es fantástico! Es más el protagonista se estaba buscando un maleficio por pesado desde el principio. O eso, o es que los lectores de terror acabamos con una ética más laxa que el spaguetti xD.
14 de abril de 2022, 21:01
Al menos el moñeco es gracioso xD. Y buena peli británica de terror sin Cushing y Lee, que a veces se nos olvida que hay vida más allá de la Hammer. Además el guión está muy bien llevado. Muchas veces en pelis del estilo, con un personaje escéptico, resulta cómico como le pasan un montón de cosas sobrenaturales y aún así él o ella niegan la evidencia. Aquí todo va poco a poco, y vas de la mano del personaje, descubriendo cosas y pistas que te llevan a la verdad: la brujería y los monstruos existen.
El relato no recuerdo haberlo leído. Sí que M. R. James es un autor de los que te cruzas con él en antologías, sobre todo si son viejunas. Y no sé si será que los lectores de terror y fantástico tenemos una ética más laxa, pero nuestro sentido de la maravilla es diferente. A mí si me quieres sorprender no me des una guerra entre Rusia y Ucrania, dame dioses primigenios o un stargate xD.