'Daredevil': una segunda temporada con muchos frentes

El año pasado Daredevil fue una grata sorpresa para los seriéfilos. En el plan de Netflix con Marvel, que incluía producir cinco series sobre superhéroes, Daredevil fue la primera en debutar. Lo que iba a ser una serie evento se convirtió en un auténtico éxito trastocando los planes de la cadena. Lo mismo sucedió con Jessica Jones, la segunda serie en estrenarse de las cinco planeadas. Netflix ha encontrado un par de éxitos que no puede dejar pasar. Está por ver que Luke Cage y Iron Fist, las próximas dos series en estrenarse ambientadas en el mundo de Marvel, funcionen igual de bien.

Si la primera temporada se ocupaba del nacimiento del héroe, las motivaciones para convertirse en vigilante, esta segunda temporada explora las consecuencias de esa decisión. Inevitablemente, convertirse en vigilante tiene consecuencias para las personas que tienes alrededor, además de trastocar tu vida personal hasta hacerla incompatible con tu identidad secreta. Una identidad fagocita a la otra introduciendo interesantes dilemas y preguntas: ¿Quién soy? ¿Quién quiero ser? ¿Quién puedo ser? Una de las características del personaje es su aversión a matar y, en esta temporada, llega a sentirse como un estorbo. Como le recuerda Punisher, cruzar esa línea es definitivo, no hay vuelta atrás.

Alguna crítica ha señalado la saturación de villanos en esta temporada. El problema no han sido los villanos, sino que no ha habido un hilo narrativo claro que conecte todas las tramas. A Matt Murdock se le han ido acumulando muchos frentes abiertos y, la que tenía que ser la gran amenaza, no lo ha sido tanto, o al menos no ha dado esa sensación que sí se producía en la temporada anterior con Kingpin. Algo similar ha sucedido con el tratamiento de la violencia: sigue siendo igual de explícita, pero ha aumentado el número y la espectacularidad de las escenas de acción.

En líneas generales, ha sido una buena temporada, continuista respecto a la primera. A falta de confirmación oficial, todo hace pensar en que tendrá una tercera temporada que, debido a los múltiples proyectos de Netflix (Luke Cage, Iron Fist, The Defenders, segunda temporada de Jessica Jones), va para largo. Seguro que la espera merece la pena.


'Los tres mosqueteros': Dumas, el folletín y las novelas de aventuras

Con la publicación en 1844 de Los tres mosqueteros Alexandre Dumas nos regaló una fabulosa aventura y uno de los personajes más famosos de la literatura universal: D'Artagnan (para los que nacimos en los ochenta «D'Artacán»). Dumas, autor romántico y de novela histórica, escribió algunas de las novelas más leídas de todos los tiempos, como El conde de Montecristo o las dos continuaciones de Los tres mosqueteros. Novelista, periodista y dramaturgo, su producción total supera las 300 obras, convirtiéndose en uno de los más prolíficos y populares autores que han dado las letras francesas.

La historia de Los tres mosqueteros es la historia de D'Artagnan, un joven gascón que parte hacia el París de Luis XIII para convertirse en mosquetero del rey y labrarse un porvenir. Muy pronto conocerá a sus compañeros mosqueteros, Athos Porthos y Aramis, y se verá envuelto en las intrigas de la corte, creándose un gran enemigo: el cardenal Richelieu, el gran antagonista de la historia.

La novela ha tenido multitud de adaptaciones al teatro y al cine, convirtiendo la obra y personajes de Dumas en referentes universales. La película clásica que pasa por canon para las demás es la de 1948, dirigida por George Sidney y con Gene Kelly como protagonista. Otra muy recordada fue la adaptación de Disney en 1993, esta vez con un joven Charlei Sheen como D'Artagnan. Unos años antes, en 1991, Disney se atrevió con Robin Hood, en lo que aprecía una estrategia por recuperar los viejos clásicos de capa y espada. Más recientemente, en 2011, tuvimos que sufrir la versión de Paul W. Anderson. Para toda una generación en nuestro país, la serie de D'Artacán y los tres mosqueperros fue el primer contacto con la obra de Dumas.

Publicada en folletines en el periódico Le Siècle, Los tres mosqueteros está escrito en una prosa ágil y dinámica, donde predominan la acción y los diálogos. Aunque a veces se le coloque la etiqueta de "literatura popular", en tono peyorativo y de manera despectiva, no cabe duda de que estamos ante una gran novela. No sólo está bien escrita, sino que es tremendamente divertida. Mal que les pese a algunos.


'Juego de Tronos': el comienzo del fin

¡OJO! SPOILERS DEL PRIMER CAPÍTULO DE LA SEXTA TEMPORADA

Volvió Juego de Tronos y de qué manera. Después del enorme cliffhanger con el que despidió la quinta temporada, la vuelta ha sido más mesurada pero igual de interesante. La serie, que entra en la recta final, en este primer capítulo se ocupa de colocar las piezas en el tablero. La impresión general es que esto va a ser una constante durante la temporada. ahora se trata de situar a cada pieza en su sitio para la resolución final.

La mujer de rojo es un capítulo que, aunque más tranquilo de lo esperado, tampoco cae en lo contemplativo. Si alguien esperaba que Melisandre resucitara a Jon Snow en los primeros cinco minutos del capítulo, se habrá llevado un buen chasco. Si de algo huye Juego de Tronos es de ser efectista. Todo lo que sucede es coherente con la narración y su desarrollo interno. Así como The Walking Dead ha jugado en la última temporada con la muerte/no muerte de alguno de sus personajes, Juego de Tronos tiene más empaque: el destino de Jon Snow sigue siendo una incógnita, pero la historia tiene suficiente fuerza como para no fiarlo todo a esa carta.

A pesar de este tono más reflexivo, el capítulo recorre y muestra a cada uno de los personajes. Y de paso vemos unas cuantas muertes. Es por eso que esta temporada irá de menos a más, como algo inevitable que está en el centro de la historia: la guerra con los caminantes blancos. Según se acerque ese momento, más vibrante y emocionante se tornará la historia.
Y Melisandre. Nuevo misterio. Derrotada por la muerte de Stannis Baratheon y Jon Snow se quita la gargantilla que lleva en el cuello y vemos la imagen de una vieja reflejada en el espejo, la verdadera Melisandre ¿Quién es? ¿Qué quiere? Nadie está a salvo en esta sexta temporada y el invierno sigue llamando a la puerta. 

'V' (1983-85): la invasión de los lagartos

V fue una serie de ciencia ficción emitida entre 1983 y 1985 por la cadena norteamericana NBC. Las dos primeras temporadas tenían el formato de miniserie. En 1983 se emitió Los visitantes, dos episodios de algo más de hora y media y, en 1984, La batalla final, tres episodios con el mismo formato. La NBC se lanzaría a la piscina en 1985 produciendo una temporada de 19 capítulos, pero la salida de ciertos personajes y el agotamiento de la trama llevó a  que el público abandonara la serie y ésta fuera cancelada.
La serie narra la llegada de unos extraterrestres de aspecto humano a la Tierra. Dicen venir en son de paz, pero poco a poco descubrimos la verdad: han venido a por los recursos de nuestro planeta y a esclavizarnos. En este sentido, el argumento de la serie bebe de novelas de ciencia ficción como El fin de la infancia, de Arthur C. Clarke, donde los extraterrestres bienhechores ocultan sus verdaderas intenciones, nada buenas para la humanidad.
El creador de la serie, Keneth Johnson, propuso a la NBC una serie sobre el ascenso de un movimiento fascista dentro de EEUU. La idea se desechó. El primer mandato de Reagan, en plena ofensiva conservadora, no era el momento más idóneo. Johnson cambió fascistas patrios por lagartos extraterrestres y NBC, esta vez sí, compró la idea. La estética nazi y su capacidad de atracción (no olvidemos que fue un movimiento de masas) está bien reflejado en la serie.
En España la serie se estrenó en 1985, dos años después de su emisión en EEUU, y supuso una auténtica revolución. No hay que olvidar que todavía faltaba más de un lustro para que llegara la televisión privada, con sólo dos canales, V se convirtió en uno de los primeros fenómenos fan que vivió nuestro país. Durante años, como con Verano azul, TVE hizo reposiciones de la serie. En los primeros años de Cuatro, volvieron a emitir V.
Se trata de una de las series que más imágenes y escenas ha dejado grabadas en el imaginario colectivo de varias generaciones en nuestro país. En 2009 la ABC resucitó la serie, pero no pasó de las dos temporadas. Y es que Diana es mucha Diana.

'Se nos fue de las manos': comedia francesa para el mercado internacional

Se nos fue de las manos es el título en español de la película francesa Babysitting. Ya desde el título original, la intención de los productores de esta cinta es el mercado internacional, en la que quizás es la menos francesa de las comedias francesas del último lustro. De hecho, tal fue el éxito de Se nos fue de las manos en 2014 que no tardó en llegar la segunda parte al año siguiente.

Franck, dibujante de cómic frustrado, trabaja como recepcionista de una gran editorial. Su dueño, Marc Schaudel, un rico egocéntrico, le obliga a hacerse cargo de su hijo pequeño, Rémi. Franck, que ese día celebra su treinta cumpleaños, verá truncado el sueño de reunirse con su mujer ideal, Sonia. Al final, serán sus dos amigos los que organicen una fiesta salvaje en la casa de su jefe. A partir de ahí, se producen situaciones descontroladas con un final feliz: Franck consigue sus sueños, publicar un cómic y salir con Sonia.

Se nos fue de las manos es una comedia blanca, sin la mala leche de otras producciones francesas como Le Placard. No es difícil rastrear las influencias de esta película en el cine norteamericano. El espejo donde se mira son las comedias tipo Resacón el Las Vegas.

El estilo de buena parte de la narración, rodada como falso documental, en teoría debería servir para dar verismo a la historia, pero tiene el efecto contrario. Tampoco llega a sacarte de la película, pero las excusas que se dan y los movimientos de cámara son muy pobres.

No es y nunca ha pretendido ser El apartamento, sólo una comedia más dentro de la tradición de Solo en casa, Poli de guardería, Colega, ¿dónde está mi coche? o Resacón en Las Vegas. En ese sentido, no defrauda, ofrece lo que ofrece sin engañar y, hay que reconocerlo, dentro de ese registro, funciona muy bien como comedia.

'La peste': Albert Camus frente al absurdo

Cuando Albert Camus publicó La peste en 1947 Europa todavía estaba en ruinas. Adscrito al existencialismo, Camus fue uno de los escritores y filósofos más importantes del siglo XX. Ganador del premio Nobel de literatura de 1957, su carrera se vio truncada en 1960 cuando perdió la vida en un accidente de coche.

Orán, año 1942. Una epidemia de peste bubónica arrasa la ciudad. Las autoridades de Orán declaran la cuarentena. Con la ciudad aislada, sus habitantes tendrán que luchar para sobrevivir. Están solos. La analogía entre la peste y la II Guerra Mundial, finalizada unos años antes, es clara. Esto en lo concreto, en un plano más abstracto representa el absurdo, tal cual. Un hecho sobre el que el ser humano no tiene ningún control. Las situaciones que se suceden están marcadas por ese absurdo.

Aunque encasillado en el existencialismo, Camus da una salida que no acaba en el cinismo o en el nihilismo. ¿Por qué vivir si no hay dios? ¿Por qué hacer el bien cuando sólo hay absurdo? Cambia el «porqué» y lo sustiye por el «para qué». Puedes reaccionar a la peste con indiferencia y autoritarismo, pero también con solidaridad. HAy distintas maneras de enfrentarse al absurdo.

La peste, en el contexto de grave crisis en la que vivimos, sigue siendo una novela de gran actualidad. Frente a lo absurdo y arbitrario de muchas situaciones que vivimos en el día a día, la única respuesta lúcida es la que nos ofrece la novela. ¿Para qué vivir? La respuesta: para ser más libres.

'1280 almas': Jim Thompson y la novela negra

1280 almas es una de las novelas más conocidas del escritor norteamericano Jim Thompson. Quizás no tan conocido como otros de sus compatriotas, sólo hay que pensar en Raymond Chandler y Dashiell Hammett, es uno de los autores más canónicos dentro del género de la novela negra. Algunos de sus libros, hoy ya clásicos de la literatura, fueron publicados en la década de los cuarenta y cincuenta en revistas pulp.

El título 1280 almas hace alunsión al número de habitantes que tiene Pottsville, el pueblo en el que es sheriff Nick Corey, el protagonista de la novela. Como el protagonista de otra de sus novelas, El asesino dentro de mí, Nick Corey es un tipo sin escrúpulos y moral, un sociópata que para mantener el puesto que tiene y solucionar sus problemas no duda en asesinar, robar o mentir. Para salir de un problema, se crea otro. Al final, será tal el efecto bola de nieve que acabará sepultado por sus propias mentiras y crímenes.

Los protagonistas de las novelas de Thompson no son personajes con los que puedes empatizar como sí sucede con otros protagonistas dentro del género. Sus protagonistas son vagos, mentirosos, asesinos, rastreros... Ya no hay bien y mal, sólo la corrupción más absoluta. Lo único que hace ese ambiente más digerible es el humor. En 1280 almas el mayor criminal, ironías de la vida, es el sheriff.

Jim Thompson no deja títere con cabeza, el retrato que hace de la sociedad es desolador, pero lejos de dejarse llevar por el nihilismo, consigue narrar una historia entretenida y divertida. Se sumerge en lo peor del ser humano, pero el estilo, directo, de frases cortas, ágil, te tiene en vilo hasta el final. Se lee en un suspiro.

'Espartaco': la alegoría de Howard Fast sobre la rebelión de los esclavos


Si alguien oye hablar de Espartaco, probablemente lo relacione enseguida con la película del mismo nombre o, más recientemente, con la serie de televisión. Pocas personas se acuerdan de la novela de Howard Fast, la que inspiró la película de Kirk Douglas. El propio Fast, militante de izquerdas, fue represaliado por su activismo y juzgado, llegando a pasar unos meses en la cárcel. También tuvo imposible trabajar bajo su nombre, teniendo que adoptar distintos pseudónimos para poder sobrevivir. Sería otro militante de izquierdas, Dalton Trumbo, el que adaptara la novela de Fast al cine.

Fast se inspiró en la III Guerra Servil, la que enfrentó a los esclavos contra la República de Roma entre el 73 a. C. y el 71 a. C. A diferencia de lo que sucede en la película, Fast nos da a conocer a Espartaco a través de otros personajes, creando una narración poliédrica que empieza con la reconstrución de su historia cuando ya sabemos que está muerto.

Toda la novela, la rebelión de los esclavos liderada por Espartaco, es una alegoría política sobre el momento histórico que vivía el mundo en 1951, y poco ha cambiado la cosa desde entonces. De un hecho histórico, que podría ir no más allá de una narración histórica, Fast construye un relato que permite al lector pensarse a sí mismo y pensar el lugar que ocupa en el mundo. Tampoco se trata de una obra de propaganda, sí de una obra política que invita a la reflexión.

Espartaco es un símbolo universal de la lucha por los derechos individuales y colectivos de una mayoría oprimida. El temor que inspiraba Espartaco a Roma es el miedo de los poderosos a perder sus privilegios. Aunque de final trágico, toda la historia funciona en la construcción de ese mito y en una invitación a pensar. De rabiosa actualidad, merece la pena darle una oportunidad y disfrutar con su lectura. Todos somos Espartaco.

'Community': la comedia de la cultura pop

Community es una comedia de televisión creada por Dan Harmon y emitida por NBC y Yahoo! Consta de un total de 110 episodios distribuidos en seis temporadas. Las continuas alusiones a la cultura popular hicieron de Community una serie muy apreciada por geeks y frikis, creando una base de fandom enorme para la serie. El humor autorreferencial de Community, si bien apreciado por unos, también supuso cierta barrera para otros, ya que la serie podía volverse muy loca con sus referencias y autorreferencias.

Muy modesta y con pocos medios, la serie sigue las aventuras de un grupo de estudio en un community college de tercera, que representa una segunda oportunidad para acceder a la universidad. La serie fue creciendo y creciendo durante la primera temporada, dejando capítulos memorables para el recuerdo. La cosa se desinchó un poco en la tercera temporada, que acabó en el despido del creador y showrunner Dan Harmon. Aunque volvería después, la serie ya no sería lo mismo. La salida de varios actores desvirtuó la serie, y las referencias a la cultura popular empezaron a empachar y a ser menos originales y sutiles.

La sobreexplotación de varios personajes y de recurrir una y otra vez a los mismos chistes, fue desgastando la serie hasta su cancelación en la quinta temporada. Siempre había estado en la cuerta floja. Yahoo! recogió el testigo y resucitó Community para una sexta temporada que, esta vez sí, fue la última y definitiva.

Divertida, paródica, auterreferencial, llena de referencias pop, a veces hasta excesiva, Community es una serie única. Cuando todo encajaba, era de lo mejor que podías ver, con momentos absolutamente geniales (los capítulos finales de guerras de paintball, los chistes recurrentes recurrentes...). El intentar estirar el chicle, con unas temporadas demasiado largas, llevó al agotamiento de ideas y a convertir a Community en una serie de capítulos más que de temporadas enteras. Nunca tuvo grandes audiencias, pero sí un público fiel que todavía la recuerda. Echaremos de menos Greendale.

'Dead Set': Charlie Brooker llama a la reflexión con sus zombis

La televisión británica siempre tiene pequeñas joyas ocultas. Dead Set es una de ellas. Emitida por el canal británico E4 a finales de 2008, consta de una única temporada de cinco capítulos, cada unos de 45 minutos de duración. En España la emitió Canal + en el verano de 2009.

Si en 2002 Danny Boyle revitalizó el género zombi/infectado con su película 28 días después, Charlie Brooker le daría una vuelta de tuerca y, al más puro estilo Romero, utilizaría a los zombis de Dead set como metáfora para una crítica social ácida. El argumento de la serie es provocador: mientras unos concursantes de un reality show, Gran Hermano, están encerrados en el estudio donde se desarrolla dicho concurso, se desata un apocalipsis zombi.

Charlie Brooker, más conocido por Black Mirror, ya apuntaba maneras en Dead Set. La crítica social, unida a un humor ácido y bastante gamberro, ya estaban presentes en esta miniserie. Si Black Mirror le permitió explorar en cada capítulo temas diferentes, en Dead Set se centró en la alienación producida por la televisión, muy especialmente por la telebasura. El final es un final sin concesiones, como corresponde a la crítica realizada. El individualismo, la alienación, el voyeurismo y el exhibicionismo propios de una sociedad decadente no pueden tener un final feliz.

Quizás menos interesante que Black Mirror por centrarse en un sólo tema, Dead Set es una serie altamente disfrutable, no sólo para los amantes del género zombi, para los que supone una renovación refrescante, sino también para los aficionados a las buenas series de televisión. Los cinco capítulos saben a poco, pero por eso son breves e intensos y no defraudan.

'Casino': Scorsese y la epopeya negra sobre la mafia en Las Vegas


Uno de los principales problemas de Casino, la película de Martin Scorsese, es la contínua comparación de ésta con Uno de los nuestros, rodada por el mismo Scorsese cinco años antes. No sólo la temática, un retrato del mundo de la mafia, es la misma, aunque cambie el escenario, es que los actores protagonistas, Robert De Niro y Joe Pesci, son los mismos, sólo falta Ray Liotta, que en esta película es 'sustituido' por Sharon Stone. Hasta Nicholas Pileggi, autor del libro en el que está basada Casino, participó en el guión de Uno de los nuestros.

Basado en el libro de Pileggi, Casino narra la vida de Sam 'Ace' Rothstein y el auge y caída de un tipo de mafia en Las Vegas. Rothstein es un jugador y apostador profesional que por sus espectaculares habilidades para ganar dinero es enviado por la mafia a Las Vegas para dirigir un casino. Su pareja de baile, el encargado de protegerle, es Nicky Santoro, personaje interpretado por Joe Pesci, un violento matón.

La película se caracteriza por una voz narrativa en off, ofreciendo distintas perspectivas de cada personaje, llegando a ofrecer también diferentes puntos de vista de una escena. Las escenas funcionan como pequeños esquemas sin desarrollar, es la voz en off la que se encarga de explicar qué es lo que vemos. La estétitca visual es muy acertada, con un vestuario y una fotografía muy cuidados, además de una banda sonora acorde con lo que estamos viendo.
El inicio es brutal. Suena el último coro de La pasión según San Mateo, de Bach, Rothstein se introduce en su coche y... ¡explota una bomba! No sabemos qué ha pasado, pero una voz en off se retrotrae en el tiempo para explicarnos cómo se ha llegado a esa escena. Como única pega, decir que se nota muchísimo el cambiazo que hacen. Sustituyen a De Niro por un maniquí.

A pesar de esa eterna comparación con Uno de los nuestros, Casino funciona de manera independiente, tiene significado por sí misma. Puede que una obra menor dentro de la filmografía de Scorsese, pero es que el nivel está muy alto.


'Escupiré sobre vuestra tumba': Boris Vian más allá de la polémica

Aunque ya han pasado setenta años de su publicación, en 1946, Escupiré sobre vuestra tumba sigue siendo una novela polémica. Se publicó bajo el nombre de Vernon Sullivan, uno de los heterónimos del polifacético y genial escritor francés Boris Vian. Tanta polvareda levantó la novela, tal fue el escándalo, que en 1949 fue prohibida en EEUU por inmoral y escandaloso, además de ser perseguidos y procesados el propio Vian y su editor. Y esto, ¿por qué?

La novela, que mezcla elementos del género pulp estadounidense con otros más propios de la tradición europea, como cierto erotismo sicalíptico, trata sobre la terrible venganza de Lee Anderson, un afroamericano con piel blanca y pelo rubio. Anderson, que debido a su color de piel puede pasar desapercibido en una sociedad tremendamente racista, se gana la confianza de dos hermanas de una familia de la alta burguesía para posteriormente asesinarlas cruelmente. Su motivación, es la venganza de uno de sus hermanos, que como él, podía pasar desapercibido por su color de piel, pero que tras ser descubierto, la familia de la chica con la que salía lo asesinó. La falta de justicia con este crimen, unido a su locura, lo lleva a cometer un doble asesinato.

En Escupiré sobre vuestra tumba se entrecruzan muchos temas. No es sólo una novela sobre el racismo, también retrata otro tipo de violencia, como la pedofilia, la prostitución o el tremendo machismo que se ejerce contra las mujeres. Acusada de ser una novela pornográfica y sádica, tiene el mérito de ir más allá que otros autores, como Arthur Miller, también acusado de inmoral por su novela Trópico de Cáncer. El protagonista de la obra de Vian es un hombre negro, un antihéroe que busca venganza por el asesinato racista de su hermano y que decide cobrársela asesinando a dos representantes de esa racismo. También es un perturbado, una mente enferma.

Boris Vian, en esta novela con múltiples capas, realiza una exploración psicológica del asesino, como lo haría mucho después Breat Easton Ellis en American Psycho —se las suele comparar a menudo—
o, más recientemente,  A. M. Homes en El fin de Alice. Esto lleva a otro tema, desgraciadamente de actualidad, que es confundir la ficción con la realidad y con ello justificar la censura de obras y artistas incómodos. 

Ironías del destino, Boris Vian murió en el cine, viendo precisamente el preestreno de Escupiré sobre vuestra tumba, la adaptación de la novela que le había causado tantos problemas. Controvertida y subversiva, violenta y de alto contenido sexual, más allá de todas estas polémicas, Escupiré sobre vuestra tumba es una de las obras más representativas del autor y del género. 

'Great Teacher Onizuka (GTO)': lo que se esconde tras la comedia

Great Teacher Onizuka es una serie de anime basada en el manga del mismo nombre de Toru Fujisawa, publicado entre 1997 y 2002. Este manga, que consta de 25 tomos, es el spin-off de otro manga del mismo autor, Shônan Jun'ai Gumi. La diferencia, para el que los haya leído, es un tratamiento más adulto de ciertos temas y un mayor peso del drama, sin dejar de lado la comedia, que es lo que le da un cierto toque ligero. La serie tiene una única temporada de 43 episodios, emitidos entre 1999 y 2000.

La serie trata sobre Eikichi Onizuka, un exmotero y delincuente juvenil que decide reformarse convirtiéndose en profesor, profesión cuya única motivación —aparentemente— para Onizuka es ligar con las colegialas. Onizuka, que no tiene ni las aptitudes ni los conocimientos necesarios, obtiene trabajo de profesor en un instituto privado, donde sus métodos poco ortodoxos le harán ganarse el aprecio de sus difíciles alumnos y de algunos compañeros.
Aunque los elementos cómicos están ahí, con un Onizuka que está todo el día salido y sólo piensa en sexo y en mujeres, la serie trata temas mucho más dramáticos y adultos, como el abuso escolar, el acoso laboral, la violencia o los problemas del sistema educativo. GTO puede pasar de la comedia más gamberra al drama en apenas segundos. Esto es, quizás, lo que hace tan digerible el tratamiento de temas más serios. Onizuka no sólo piensa en ligar con jovencitas, también tiene un espíritu de superación que le lleva a convertirse mejor profesor para sus alumnos, por los que está dispuesto a hacer cualquier cosa. Unos adquieren sus conocimientos en una universidad cara, él en la escuela de la vida.

Leyendo cualquier sinopsis que se encuentra por la red, GTO parece poca cosa, pero bajo esa apariencia de comedia gamberra se esconde una muy buena serie de anime. Es fácil identificarse con alguno de los alumnos de Onizuka y con sus problemas, lo que hace valorar aún más el papel del propio Onizuka, que ya no nos parece un simpático gamberro y sí un verdadero profesor y mentor.

'Fear the Walking Dead': los zombis vistos desde otro ángulo

Fear the Walking Dead es la precuela de la serie de éxito The Walking Dead. Basada en el cómic de título homónimo de Robert Kirkman, The Walking Dead supuso un éxito de grandes proporciones para la cadena AMC, que permitió ver a los aficionados al género una serie sobre zombis. Varias temporadas y muchos zombis después, AMC decide no sólo emitir, sino también producir, una nueva serie sobre zombis. En verano de 2015 vio la luz Fear the Walking Dead, que al igual que la serie madre, tuvo una primera temporada cortita, de seis episodios.

La serie es una precuela de The Walking Dead, situando la acción de su primera temporada en Los Ángeles, en el momento previo al colapso de la civilización debido a la epidemia zombi. Esta primera temporada trata sobre la caída, dándonos una visión completamente diferente a The Walking Dead, que empeada in media res. También se centra en explicarnos la formación de un grupo de supervientes que, se supone, serán los protagonistas de la serie.

Hasta ahora, tanto en el cómic como en la serie de televisión y los juegos de PC, The Walking Dead se había centrado en un grupo de supervivientes en el mundo postapocalíptico infestado de zombis creado por Kirkman. Fear the Walking Dead cambia el ángulo de visión y se centra en los primeros días de la plaga, siguiendo la evolución de unos personajes que ven el mundo que habían conocido desmoronarse.
La segunda temporada se centra en el grupo de supervivientes de la temporada anterior huyendo de la plaga zombi en un yate. Como se ha comentado en otros blogsFear the Walking Dead tiene el reto de diferenciarse de su serie madre, no sólo en cuanto al escenario de la acción, sino también en cuanto al tratamiento de la temática zombi. AMC emitió la precuela en verano. A la semana siguiente de la emisión del último capítulo, empezó la sexta temporada de The Walking Dead. En cuanto ha terminado ésta, ha empezado la emisión de la segunda temporada de Fear the Walking Dead. O consiguen que sea una serie diferente, o va a haber empacho zombi. De momento, el primer capítulo nos ha dejado una buena canción.

El Ciclo de la Puerta de la Muerte: Margaret Weis y Tracy Hickman más allá de la Dragonlance

Si por algo son conocidos Margaret Weis y Tracy Hickman es por ser los creadores de la saga literaria de fantasía épica Dragonlance, inspirada en el juego de rol Dungeons & Dragons. Para bien o para mal, otros muchos han intentado imitar su estilo. La mayoría sin mucho acierto, todo hay que decirlo. La saga Dragonlance también ha engullido a sus propios autores, eclipsando otras obras que para el lector de fantasía épica son muy recomendables, como El Ciclo de la Puerta de la Muerte.

Compuesto por un total de siete novelas, esta heptalogía fue publicada entre 1990 y 1994. En España ahora está descatalogada, pero la editorial que la publicó, Timun Mas, vendía estos libros en librerías y supermercados, donde no era difícil encontrar estos libros mezclados con otros de la Dragonlance, también publicados por la misma editorial en nuestro país.

La historia está ambientada en un futuro donde la Tierra fue dividida en cuatro mundos por una raza de semidioses, los sartán. Estos llevaron a cabo la destrucción del planeta debido al ascenso imparable de otra raza de semidioses, los patryn, enemigos de los sartán. Los sartán encerraron a los patryn en el Laberinto y se dedicaron a gobernar los otros mundos trasladando a ellos razas consideradas menores: elfos, humanos y enanos. La saga comienza cuando los patryn salen del Laberinto y envían a uno de los suyos a investigar los cuatro mundos y a descubrir qué ha pasado con sus enemigos ancestrales.
La idea de dualidad está muy presente en la novela. Todas las cosas tienen su contrario, que las complementa. No aparecen dioses, pero sí la idea de una armonía natural que se corrige a sí misma.

El Ciclo de la Puerta de la Muerte es una obra ambiciosa, muy bien construida. Así como otras sagas mueren de éxito y empiezan a meter relleno para estirar el chicle, esta heptalogía parece haber sido pensada desde el principio con mucho detalle. Las pequeñas pistas que se nos dan en los primeros libros construyen un mosaico mayor pensado de antemano. Unidad y coherencia. Todas las tramas encuentran un cierre al final, no se dejan cabos sueltos. Sin ser un gran aficionado al género, merece la pena darle una oportunidad a esta saga.

'Jordskott': fantasia y misterio en Suecia

Creada por Henrik Björn, Jorskott es una serie sueca de misterio, intriga y fantasía. Algunos la han definido como la Expediente X nórdica, incluso como una especie de Fringe sueco, pero nada más lejos de la realidad. Sí hay un elemento sobrenatural claro, pero más orientado hacia la fantasía. El ambiente onírico, la atmósfera creada, emparentan a Jorskott con otro timpo de series, como Twin Peaks o la francesa Les Revenants. Las etiquetas definen, y esas definiciones crean un tipo de expectativas en el telespectador. Sería injusto que alguien buscara en Jorskott lo que no es y, defraudado, no le diera una opinión a la serie.

La serie, estrenada en 2015, cuenta con diez capítulos de una hora. Su hasta ahora única temporada, aunque abierta a una continucación, cierra todas las tramas. En este sentido, no es tramposa ni se pierde en regates al espectador. Si hay una segunda temporada, el punto de partida será el final bien cerrado de la primera temporada.

Jorskott narra la historia de Eva Thörnblad, una agente de policía que regresa a su pueblo natal, Silverhöjd, tras la muerte de su padre. En ese mismo pueblo, siete años antes, tuvo lugar la desaparición de su hija Josephine, presuntamente ahogada, pues su cuerpo nunca fue encontrado. En el momento de su regreso, se produce otra desaparición similar a la de su hija. Además, deberá resolver la muerte de su padre, empresario, pues alguien parece defender el bosque frente a los intentos de explotación del mismo por parte de Thörnblad Cellulosa. Este será el punto de partida de la serie, pero no hay que dejarse engañar. No es otra serie nórdica policial. No es Wallander. El punto de partida sí que podría ser el de una serie de este género, pero la introducción de elementos sobrenaturales y fantásticos enseguida la alejan del policial.

Se agradece lo bien construida que está, pues hacia mitad de temporada tiene un giro de guión que cambia todo. El giro está bien resuelto, y lejos de perder interés, la serie lo aumenta, pues abre nuevas posibilidades narrativas. No se trata de un giro tramposo. Puede gustar más a menos, pero está bien construido y justificado. Y la serie no lo fia todo a ese giro de guión. Mantiene el interés. A veces sucede que una vez revelado el misterio, o parte del misterio, decae el interés . No es el caso.

No todas las serie nórdicas tienen que ser sobre policía y crímenes en pequeños pueblos de Escandinavia. También existen series de otros géneros, como Äkta människor, o series que juegan con las convenciones del género para alejarse de él, como Jorskott. Buena serie, con mensaje ecologista y conservacionista, nada tramposa y con una mezcla de fantasía y misterio altamente disfrutable.




'The Walking Dead': una sexta temporada demasiado efectista


(OJO, SPOILERS DE LA SEXTA DE THE WALKING DEAD)

The Waking Dead llega al final de su sexta temporada entre sensaciones encontradas. Por un lado, la primera mitad de la temporada hasta el parón navideño ha estado marcado por la muerte/no muerte de Glenn, que deslució la historia sobre el ataque de Los Lobos a Alexandria. La segunda parte de la temporada también ha estado marcada por incoherencias varias y una presentación del personaje de Negan demasiado efectista, acabando con un cliffhanger que le resta fuerza narrativa.
Esperando turno en la carnicería

Lo de amagar con matar a un personaje es algo que muchas series hacen. The Walking Dead no es especial en este sentido. Sí falla en amagar y no resolverlo bien. En este sentido recuerda a otras series como Sons of Anarchy, que de tanto ir el cántaro a la fuente, estiró demasiado el chicle y perdió interés. El amago de matar a Glenn es un recurso narrativo que ya habían explotado los guionistas varias veces en anteriores temporadas. Al final, como sabemos cómo va a acabar, pierde fuerza y se desinfla. Lo peor de todo fue resolverlo con un deux ex machina demasiado escandaloso. Si al menos esa resolución se hubiese dado al capítulo siguiente, no hubera deslucido tanto el resultado final de esta primera mitad, que tiene un inicio brutal y cuenta con buenos capítulos.

Control de carretera en la A-62
Algo parecido sucede con la segunda mitad de la temporada, demasiado enfocada en la presentación final del personaje de Negan. En cierto sentido, ha sido jugárselo todo a una carta, y ya sabemos que si esa carta no funciona, desmerece todo lo demás. Todas esas sensaciones sobre un final inadecuado, se ven acentuadas por la duración del capítulo final, que estiran hasta la hora y pico, y que tiene los mismos problemas que el resto de la temporada: fiarlo todo a una resolución final que no convence. Además hay decisiones discutibles, como volver a amagar con la muerte de otro personaje (Daryl) o un desarrollo incoherente —es discutible— de otro (Carol).
Negan, Lucille y Rick y otros zombis del montón, la nueva de Almodóvar
Los giros de guión bastante absurdos, deux ex machina sin sentido, incoherencias narrativas varias y abuso de ciertos recursos narrativos, han marcado una temporada que en conjunto, tampoco se puede calificar de mala, pero sí de desacertada, marcada por estas decisiones. Lo positivo es que tienen material suficiente (los cómic) para remontar y corregir todos los fallos que han tenido en esta sexta temporada. Buscando menos el golpe de efecto en el espectador, la serie gana un montón. ¿Alguien ha dicho zombis?





'Lupin y el corazón púrpura de Cleopatra': una parodia no intencionada de Lupin III

Lupin III es una de las series de anime más míticas y valoradas por los aficionados. Estaba basada en el manga de Kazuhiko Kata, que consta de doce volúmenes. Este manga dio pie a las tres series de anime, pero también a seis películas de anime, una serie de televisión, un musical, bandas sonoras, varios videojuegos y obras de teatro y un par de películas de acción real. Lupin y el corazón púrpura de Cleopatra es la segunda de ellas.

El creador de los Studio Ghibli, Hayao Miyazaki, dirigió vasrios capítulos de la serie de anime y alguna de sus películas, El castillo de Cagliostro. Además de la multitud de obras derivadas del manga origunal, Lupin III también ejerció una poderosa influencia en otros mangas y animes, como Cowboy Bebop, o en directores de cine como Steven Spielberg, que alabó El castillo de Cagliostro diciendo que era la película con la mejor persecución de coches de la historia.
Dentro de este universo de Lupin III, la película Lupin y el corazón púrpura de Cleopatra es una obra menor. Ambientada en la actualidad, Lupin III tendrá que llevar a cabo un robo y acabar con el malo de turno. Para ello, contará con aliados, que no son otros que los compañeros que aparecen en el manga o el anime. La película intenta ser fiel al espíritu original, pero hay ciertos elementos, como el del humor, que no terminan de funcionar.

La película recibió malas críticas. Si para Spielberg El castillo de Cagliostro era un ejemplo de escena de perseución de coches en el cine, la persecución que aparece en Lupin y el corazón púrpura de Cleopatra entre un Fiat 600 y un Hummer es todo un despropósito. Todo en la película parece tener un aire cómico. El problema, es que no es esa la intención. La coreografía de las peleas no está mal hecha para reírse. Es como si hubiesen hecho Shaolin Soccer en serio y no para reírse. Algo falla. Eso, unido al excesivo metraje de la cinta, de más de dos horas, convierte una película para pasar el rato en un soberano tostón.

'Conan, el bárbaro' (1982): el secreto del acero

Conan, el bárbaro es la película por antonomasia de lo que se ha venido a llamar espada y brujería. La película fue el primer gran éxito en el cine de Arnold Schwarzenegger, que lo catapultaría al estrellato. Repitió papel dos años más tarde para la secuela, Conan, el destructor, película que tuvo menos fortuna que su antecesora. Escrita por Oliver Stone y John Milius, fue la primera adaptación al cine del personaje de Robert E. Howard.
La película narra el viaje del guerrero, desde que es un niño hasta que se convierte en un héroe. Thulsa Doom, un cruel guerrero que combate bajo el estandarte de la serpiente, masacra un pueblo de Cimmeria, donde sólo se salvan los niños para ser vendidos como eclavos. Uno de estos niños es Conan, que se convertirá en el único superviviente, vendido cuando es adulto a un preparador de gladiadores. Convertido en un gran y temible guerrero, es liberado. Convertido a partir de entonces en ladrón, con la compañía de Valeria y Subotai, descubrirá que Thulsa Doom sigue vivo, convertido en un tirano de gran poder. A partir de entonces, Conan buscará vengarse de Doom, que masacró a sus padres y a su pueblo y le convirtió en esclavo.
Ya es Semana Santa en Cimmeria
Conan, el bárbaro tuvo dos secuelas: Conan, el destructor y Red Sonja, en esta última, por problemas con los derechos de autor, el personaje de Conan se llamó Kalidor. Ninguna de estas secuelas estuvo a la altura de la primera película, iniciando un camino descendiente en cuanto a calidad que se vio reflejado en un abandono de la saga.

La banda sonora de Basil Poledouris da a la película un carácter épico y dramático, convirtiéndose en ejemplo de banda sonora épica. Si no es la mejor en este género, sí está entre las tres mejores.
La película tiene los elementos característicos del género: romance, magia y elementos sobrenaturales. El director, John Milius, acertó de pleno en el tratamiento que hace de la violencia y el sexo. Las secuelas, especialmente la segunda, pierden esta carácterísticas en favor del humor y de 'blanquear' al héroe hasta convertirlo en una caricatura de sí mismo. ¿Quieres saber cuál es el secreto del acero? Conan te lo cuenta.

'Wynonna Earp': el western fantástico de SyFy

Wynonna Earp es la nueva serie de SyFy, cadena que ha hecho todo un esfuerzo esta temporada produciendo series como The Expanse o The Magicians. SyFy se ha preocupado por tocar un palo diferente con cada. Con Wynonna Earp, una adaptación del cómic de Beau Smith, SyFy consigue un western de fantasía sobrenatural, algo que hasta ahora no tenían en la parrilla. 
La serie trata sobre Wynonna, personaje interpretado por Melanie Scrofano, la antiheroína que regresa a casa, Purgatory, para hacerse cargo del legado de su familia. Todos los descendientes primogénitos de Wyatt Earp, cuando cumplen 27 años, adquieren poderes y la obligación de acabar con los monstruos y demonios que acechan Purgatory. Wynonna heredará esta responsabilidad. Para cumplir con su deber tiene a Peacemaker, el mítico revólver que usaba Wyatt Earp para acabar con las criaturas sobrenaturales y devolverlas al infierno. Además, se convertirá en agente de la ley. En concreto,  de la Black Badge Division, unidad especial dedicada desde hace más de cien años a perseguir lo sobrenatural.
Hay que recordar que el cómic data de 1997. Muchas cosas que se ven en la serie y que nos remiten a otras series (el Colt que utilizan los hermanos Winchester en Sobrenatural para matar demonios), ya estaban en el cómic. El concepto de gang o pandilla que se forma en el primer capítulo, con Wynonna convertida en agente de la ley y apoyada por su hermana y otros personajes amigos, recuerda la pandilla de Buffy, cazavampiros. Está por ver la evolución de los personajes, pero va a ser un elemento crucial.
Wynonna Earp es una heroína pulp, un agente de la ley encargado de mantener el orden y la paz en Purgatory a punta de pistola. SyFy se sube al carro de las series con protagonistas femeninas fuertes, como en su momento lo fue Buffy o como lo es Jessica Jones. Si no pierde ese caracter pulp tomándose muy en serio, Wynonna Earp puede convertirse en una gran serie para los aficionados del género.

'Roma': el nacimiento del Imperio Romano

En 1976 la BBC estrenaba una serie histórica sobre el Imperio Romano, Yo, Claudio. Los aficionados al género tuvimos que esperar hasta 2005, fecha en la que la HBO, junto a la británica BBC y la italiana RAI, se animó a producir Roma, otra serie histórica sobre la antigua Roma. Dotada de un gran presupuesto, la serie contó con un total de veintidós capítulos divididos en dos temporadas. Su elevado coste y la dificultad de su producción (entre una temporada y otra pasaron casi dos años), llevó a la cancelación de la serie.

Los protagonistas de Roma eran dos legionarios de Julio César, Tito Pullo y Lucio Voreno, cada uno con caracteres muy distintos pero también complementarios que van evolucionando en cada capítulo. A través de estos personajes conocemos la historia de Roma y algunos de los hechos históricos más importantes de su tiempo, así como las luchas entre las dististas facciones por hacerse con el poder de la misma.
Roma se tomó muy en serio a sí misma, al menos durante la primera temporada, haciendo un retrato de la sociedad de la época. El gran presupuesto con el que contó también ayudó a dar verismo a una serie donde presentan una ciudad sucia y unos personajes de carne y hueso que sangran. Si la primera temporada se centraba en la Guerra Civil entre partidarios de César y partidarios de Pompeyo, la segunda reflejó el fin de la República y el nacimiento del Imperio, aunque haciendo bastantes concesiones al melodrama y al culebrón.

No fue una serie perfecta, pero sí sirvió de precursora a otras que vendrían después, tanto en el apartado técnico (sobre todo de producción) como en el tratamiento de la violencia y el sexo, hasta entonces algo casi inédito en televisión. Aunque no la única, sería Juego de Tronos la que más aprovecharía el legado de Roma. Desde la victoria de Julio César en la Galia hasta la caída de Marco Antonio y Cleopatra, Roma es una serie histórica amena y muy bien producida.