Demonic es una película que viene con el sello de "producida por James Wan". Lo que está bien para tener una buena distribución en salas y una buena publicidad en medios, quizá no está tan bien para otras cosas, como no despertar unas altas expectativas en público  crítica que luego no se ven cumplidas. Quien espere un Insidious u otro The Conjuring, se equivoca. Demonic es una película más de intriga que de terror, que salvo cuatro sustos y un final sobrenatural, poco más hay.

Cinco estudiantes son asesinados en una casa mientras hacían una sesión de espiritismo. En la misma casa, décadas antes, también habían tenido lugar unos crímenes relacionados con un ritual. Un policía y una psicóloga serán los encargados de interrogar al superviviente de la masacre y esclarecer los hechos. La película utiliza una narración en presente y otra en pasado, completando así, mediante flashbacks, la información que tienen los personajes y el espectador.

Utilizar la técnica de metraje encontrado, aunque justificada en un primer momento, se vuelve confusa e impide que la narración sea más fluida. Si no se hubiese rodado así no hubiese pasado absolutamente nada.

Toda la narración está construida para llegar a un giro final, donde la película se juega el todo por el todo. Auqnue pueda no gustar, por caer en lugares comunes y poco originales (se veía venir), sí que está bastante bien resuelto.