'Warcraft:The Beginning', el inicio de una saga
Adaptar cinematográficamente un videojuego nunca suele ser fácil y depende en gran medida del tipo de videojuego. Warcraft no es diferente otras adaptaciones. Una de las cosas que más paga la película es el planteamiento en exceso abierto para otra secuela. El plan es crear una saga de películas basadas en el videojuego que sean independientes y funcionen fuera de éste.
El control de Duncan Jones, el director, sobre la propia película, parece haber sido mínimo. Duncan Jones mostró su estilo y buen hacer en Moon y Source Code, películas de presupuesto más que ajustado, sobre todo la primera. Sin embargo en Warcraft no se nota mucho su mano.
La película narra narra la gurra entre orcos y humanos. Los primeros abandonaron su planeta consumido y emigraron al planeta de los humanos Pero si no quieren que éste acabe con el suyo, deberán aliarse para derrotar al verdadero enemigo. El metraje de la película es excesivamente largo para lo que cuenta, y sin embargo se nota demasiado que han recortado escenas. Con lo fácil que sería hacer películas de hora y media y recortar escenas de acción llenas de CGI que no aportan nada a la tramaa. Para colomo, Travis Fimmel, que encarna al protagonista humano, demuestra una vez más que sólo tiene un registro como actor. Dependiendo del papel, canta más la cosa o menos.
Warcraft es lo que es, una película épica y de acción bastante blanca, pero entretenida. Maniquea, los personajes son bastante planos por necesidad. No hay que esperar personajes llenos de matices enfrentados a grandes dilemas morales. En Warcraft los personajes son funcionales a una trama bastante sencilla. Lo mejor de la película es que no se han estrellado con la adaptación; lo peor es que tampoco han conseguido una película memorable, lo cual no sería una pega si sólo pensasen rodar una película, pero todo apunta a saga.
14 de febrero de 2017, 13:39
Coincido en lo de Travis Fimmel, se pasó media película poniendo cara de desquiciado XD. Y tambíen en los defectos: se hace larga, pero se nota que han recortado escenas y faltan cosas (el problema no es ya conservar las secuencias de argumento y prescindir de los cgi, sino el plantear directamente una producción de hora y media), está demasiado pensada para empezar una saga, que la habrá, viendo los resultados en China, y en general, no deja de tener un aspecto un poco de segunda. Todo parece un poco de decorado, desde las brilantes armaduras hasta esos elfos asiáticos que parecen un cosplay.
Y a pesar de todo, teniendo en cuenta el material, no salió mal del todo. Es una película que va a lo que va, que es a expandir una franquicia. Se habría agradecido un producto más cuidado, pero al menos no es Dungeons and Dragons..
22 de febrero de 2017, 20:41
Lo de las armaduras sí que me llamó la atención, sobre todo en contraste con la representación en pantalla de los orcos. En comparación, el vestuario de los humanos era bastante cutre. Que tampoco voy a pedir realismo, pero sí que se cuiden un poco más los detalles. En general se me hizo entretenida, aunque claro, si la comparamos con "Dungeons and Dragons" es una obra maestra xD. Y yo que la fui a ver al cine...