'The Darker Sex': más señoras victorianas
Mike Ashley editó un par de antologías a finales de los dos mil para la editorial Peter Owen que recogían, por un lado, la contribución de las mujeres en los inicios de la ciencia ficción, y por otro su contribución al género del terror. Este último dio como resultado este libro, The Darker Sex, Tales of the Supernatural and Macabre by Victorian Women Writers. Porque Mike Ashley, además de editar y publicar libros sobre el rey Arturo, barcos, magia y detectives, es un experto del fantástico anglosajón del siglo XIX y principios del XX. Y desde hace ya bastantes años es uno de los herederos de Richard Dalby y su The Virago Book of Ghost Stories publicado a principios de los noventa del siglo pasado.
En la muy breve introducción del libro, de apenas dos páginas, Mike Ashley establece su tesis: las mujeres, que estuvieron presentes y fueron protagonistas del nacimiento del gótico en el siglo XVIII, en la época victoriana contribuyeron en cantidad y calidad al género del terror. Y da cuenta de ello en The Darker Sex, una antología que recoge once relatos escritos por mujeres, con nombres más o menos obvios, como los de Elizabeth Gaskell, Mary E. Braddon y Charlotte Riddell, y otros más sorprendentes y/o desconocidos como Mary E. Penn, Violet Quirk y Louisa Baldwin. Como suele pasar en casi todas sus antologías, este libro de Mike Ashley es un conjunto bastante equilibrado. Recoge la contribución, dentro del mundo anglosajón, de mujeres británicas (en su concepción más amplia, imperial) y estadouninses al terror.
En The Darker Sex nos encontramos con narraciones bastante conocidas como The Old Nurse's Story de Elizabeth Gaskell, The Lifted Veil de George Eliot y The Shadow in the Corner de Mary Elizabeth Braddon. También hay relatos menos conocidos de autoras conocidas en otros géneros, como puede ser el caso de Edith Nesbit, cuyas obras infantiles siguen publicándose hoy en día, y cuyo relato incluido en esta antología, The Third Drug, puede llegar a sorprender a más de uno. Luego está la labor de rescate de autoras como Mary E. Wilkins Freeman; Arkham House reeditó uno de sus libros a mediados de los setenta, que pasó un poco sin pena ni gloria. Incluso uno de los más recientes libros que tratan de rescatar autoras y crear un nuevo canon literario, como Monster, She Wrote, sólo la mencionan de pasada. Y finalmente está la labor de arqueología que tanto parece disfrutar Mike Ashley, que nos trae textos y autoras completamente desconocidos. Y añadiría que generalmente buenos. Porque si algo queda claro después de este tipo de antologías es que no se trata de un ejercicio de memoria, sino de poner en valor la obra de unas autoras que está a la misma altura que su contraparte masculina, pero que nunca ha disfrutado de su visibilidad y difusión.
La cara de Mary E. Wilkins Freeman cada vez que escribís hayga |
Algunos de los relatos que destacaría y que no había leído antes son The Tenant of the Cedars de Mary E. Penn, sobre una casa encantada en un pueblo, un asesinato, un fantasma que busca venganza y una canción, The Song of Love and Death, que se repite más que Los 40 Principales. Louisa Baldwin escribió Sir Nigel Otterburne's Case, un relato realmente extraño sobre una oscura maldición familiar, que consiste en que los muertos te van a buscar, se reúnen debajo de tu ventana sin decir nada, sin hacer nada, salvo indicarte que ha llegado la hora de reunirse con ellos. En The Three Kisses Violet Quirk nos cuenta la historia de una mujer cuyo fantasma vuelve para reclamar a su hijo, no por amor, sino por venganza. Y de los relatos ya leídos, además muy recientemente, volvería a hablar de Mary E. Wilkins Freeman y Luella Miller, una historia sobre vampirismo bastante atípica. Luella Miller parece alimentarse de la fuerza vital de los que la rodean, matándolos en el proceso, pero todo sucede de una forma tan natural que la propia Luella parece no darse cuenta de su naturaleza. Que la gente haga lo que ella quiere parece lo normal, y que se mueran después de un tiempo parece la consecuencia lógica.
Tanto The Darker Sex como su hermano gemelo The Dreaming Sex son un buen compendio y resumen de la contribución de las escritoras anglosajonas al género fantástico en su concepción más amplia. No llega al nivel de Queens of the Abyss: Lost Stories from the Women of the Weird del propio Mike Ashley o de las antologías de Melissa Edmundson pero The Darker Sex es una lectura interesante y bastante entretenida, y si ya tienes leídos a M. R. James, H. P. Lovecraft y demás clásicos del género, es una buena fuente de nuevas lecturas. Por mi parte, voy a empezar a llenar la casa de gatas y a ponerles nombres de señoras victorianas.
Ashley, M. (2009). The Darker Sex, Tales of the Supernatural an Macabre by Victorian Women Writers. Peter Owen.
Ashley, M. (2010). The Dreaming Sex, Early Tales of Scientific Imagination by Women. Peter Owen.
Ashley, M. (2010). The Dreaming Sex, Early Tales of Scientific Imagination by Women. Peter Owen.
Ashley, M. (2008). Unforgottable Ghost Stories by Women Writers. Dover Publications.
Ashley, M. (2020). Queens of the Abyss: Lost Stories from the Women of the Weird. British Library.
18 de mayo de 2022, 15:13
Pues la verdad es que tiene una pinta muy apetecible. Un abrazo.
19 de mayo de 2022, 15:07
La verdad es que es bastante entretenido. Me gustan las antologías de relatos cortitas. Igual, teniendo en cuenta todo lo que se ha publicado desde entonces, este no es el mejor libro para acercarse al tema, pero aún así, algunos relatos merecen mucho la pena.
25 de mayo de 2022, 8:20
Todo lo que sea llenar una casa con gatos de nombres respetables, me parece correcto XD. Aunque a estas alturas, a Elizabeth Gaskell se la podía considerar tan de casa como un familiar cercano, por la cantidad de veces que ha salido en colecciones.
También es cierto que esta labor de arqueología es una buena forma de recuperar la labor de autoras que han quedado enterradas con el paso de la historia de la literatura popular, y que muchos de estos relatos, son reconocibles a posteriori en otros argumentos y tendencias más recientes. Las aproximaciones al vampirismo, la presión familiar y la soledad están mucho mejor desarrolladas en muchas de estas autoras que en clásicos más conocidos.
26 de mayo de 2022, 17:59
De momento por razones de espacio tengo que elegir entre gatos o libros xD.
A Gaskell le tengo cogida manía xD. Siempre aparece en estas antologías y siempre con el mismo relato. Típico caso de autora realista, que se la recuerda como tal, pero que tiene un relato de temática sobrenatural bastante conocido y antologizado. Al menos en otros casos hay algo más de variedad.
Yo todavía me sigo sorprendiendo de la cantidad de material que hay de autoras de la época. Y que además también tiene calidad. Entre esto, el pulp de Mary Elizabeth Counselman y Margaret St. Clair, y el fantástico europeo de entreguerras, tengo lecturas para sobrellevar la viruela del mono. O el apocalipsis nuclear. Que igual en un mundo Mad Max es más importante la gasolina que los libros, pero ahí están Charles Derennes, Aleksandr Kuprín y Maurice Renard esperando en mi mesilla xD.